Decoración en amarillo: un toque de color

Llega la primavera y ya va apeteciendo ver esos tonos cálidos, tan característicos de la temporada. Así que hoy vamos a hablar de la decoración en amarillo para llenar de vida las estancias de nuestras casas. A ver, no es necesario abusar del color, pero sí que podemos optar por crear espacios singulares con algunos elementos ideales.

¿Cómo lograr una decoración en amarillo ideal?

La verdad es que no hay un truco claro que nos diga cómo hay que hacerlo para que nuestra decoración en amarillo no sea cargante. Quizás todas las imágenes que vamos incluyendo en este artículo te sean de ayuda para encontrar tu inspiración y seguir algunas ideas fabulosas. Tras ver la cantidad de opciones disponibles, creo que esta va a ser mi apuesta en cuanto a decoración primaveral. Lo cierto es que no hace falta seguir muchas tendencias decorativas, simplemente, con el uso de diversos complementos de color podremos lograr ambientes tan geniales.

Yo voy a optar por utilizar el amarillo como color para dar un toque diferente a mi salón. Lo puedo hacer con facilidad, ya que la decoración básica de mi casa se rige por los tonos grises y blancos. Así que no hay problema para apostar por los colores vivos para complementar la sobriedad. Si os fijáis, los grises funcionan estupendamente con el amarillo. Una buena forma de comenzar es recurriendo a los textiles para poco a poco lograr el efecto deseado. Decorar con cojines amarillos será una gran idea. Obviamente, algún plaid o manta para el sofá nos podrá servir de ayuda.

Utilizar elementos decorativos para recurrir a la decoración en amarillo es perfecto. Lámparas o cualquier tipo de pieza de decoración puede ser perfecta para conseguir ese efecto fresco que vamos buscando.

En la cocina puedes poner los azulejos que hay sobre la bancada en algún color para potenciar el contraste. Y si eres muy atrevido también podrías arriesgar con una nevera de color. Eso sí, será mucho más complicado cambiar después, de tendencias, cuando te canses. Así que mi apuesta es por muebles y elementos neutros para darles un toque diferente con pequeños objetos.

Está claro que para seguir una decoración en amarillo podrás llegar hasta donde quieras. El riesgo y los límites los pones tú. Un sofá en color, cortinas o, incluso, paredes, son opciones geniales para conseguir una decoración diferente. Yo no suelo recomendar que las paredes se pinten en tonos tan vivos porque pueden cansar, pero cada uno podrá jugar sus cartas como más le guste. Y, la verdad, es que hay decoraciones extremas que quedan estupendamente.

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