Hoy tengo una responsabilidad enorme porque os voy a hablar de mi tierra, Elche. En un principio tenía pensado escribir sobre algún pueblo español donde poder hacer una escapada sin igual, teniendo en cuenta que se acerca el puente de diciembre. Y pensando he decidido hablaros de un lugar único que para mí es mágico, la ciudad de las palmeras.
Si visitáis Elche, estoy convencida de que su entorno y las posibilidades que esta ciudad mediterránea ofrece no os va a decepcionar ni un ápice. Las opciones que tenemos para disfrutar de unos días de descanso son infinitas y su gastronomía goza de un nivel que no tiene parangón.
El Palmeral de Elche, Patrimonio de la Humanidad
Viajar a Elche y no visitar su imponente Palmeral es imposible, sobre todo porque las palmeras son el alma de esta ciudad. De hecho las podemos ver desde cualquier rincón de la ciudad. Se trata del palmeral más grande de Europa, que cuenta con más de 20.000 ejemplares en su haber. La antigüedad de este lugar se remonta a hace más de 1000 años y en el año 2000 fue declarado por la Unesco Patrimonio de la Humanidad. Los que estamos acostumbrados a ello no lo apreciamos tanto como los visitantes, pero el paisaje y el entorno son realmente únicos.
Las posibilidades que ofrece esta ciudad son muchísimas. Es posible visitar su Museo Arqueológico y de Historia, donde se podrá ser testigo de la historia real de la ciudad. Además, en La Alcudia se puede ver el lugar exacto en el que se encontró la famosa Dama de Elche. La Calahorra y la Basílica de Santa María son también obras de imprescindible visita si se va a pasar unos días en este enclave.
Visitar Elche en verano, durante sus fiestas de agosto nos permitirá ser testigos de excepción de algunos de los eventos más llamativos de la ciudad. El famoso Misteri D’Elx, una drama sacro-lírico que se representa en el interior de la Basílica de Santa María. Se trata de una obra religiosa única, ya que es la única que perdura en el tiempo, representándose tal cual desde sus inicios. El Misteri también ha sido declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad. Por otra parte tenemos la Nit de L’Albà, un espectáculo de fuegos artificiales que no tiene desperdicio. Se celebra el día 13 de diciembre a partir de las 23.15 h. de la noche y todos los ilicitanos y amigos subimos a las azoteas de los edificios a disfrutar de nuestra noche mágica. Al finalizar se lanza la palmera imperial en honor la virgen de la Asunción, la patrona de la ciudad.
Las playas ilicitanas se encuentran a escasos kilómetros de la ciudad. Allí es posible pasar un día de ensueño, tanto en verano como en invierno gracias a la temperatura ideal que solemos tener por estos lares.
No puedo hablaros de Elche y no recomendaros que probéis su fantástica gastronomía. Si venís por la zona es obligatorio comeros un arroz con costra, muy típico del lugar o una paella de arroz, conejo y caracoles hecha a la leña. Además, también tenemos suculentos platos tradicionales como las pipes i carasses, que son totalmente recomendables. Después de todo esto, lo ideal es salir a conocer la noche ilicitana. En cualquiera de los locales de ocio nocturno podremos degustar los cócteles más agradables que podamos imaginar. ¿Qué me decís? ¿Os venís a pasar unos días?
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